El sacerdote católico Lázaro Hernández Soto hizo un llamado a matar a las mujeres que deciden sobre su cuerpo y optan por la interrupción del embarazo. Las declaraciones, que hacen apología al feminicidio, fueron captadas en video y difundidas en redes sociales.
De acuerdo con la investigadora mexicana Marcela Lagarde un feminicidio es el acto de privar de la vida a una mujer solo por el hecho de su pertenencia al sexo femenino. Además, confirió al concepto un significado político con el propósito de denunciar la falta de respuesta del Estado y el incumplimiento de sus obligaciones de investigar y de sancionar este tipo de actos.
El evento se registró, este domingo, en la iglesia La Salle de Monclova, Coahuila, durante en la homilía, donde dijo: «No apoyen a las jóvenes matando a sus hijos para que dejen de estorbar y se diviertan, mejor maten a sus hijas para que ellas no estorben».
«Una mujer que aborta ya no sirve para nada, está hueca, moral, física y psicológica…», agregó, el clérigo, en un país donde se asesinan diariamente 11 mujeres.
El pasado 7 de septiembre, con unanimidad de 10 votos, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inconstitucional la penalización del aborto. El Pleno invalidó el Artículo 196 del Código Penal de Coahuila que imponía la pena de cárcel a la mujer que se practicara un aborto o a la persona que la ayudara con su consentimiento. Así, «entendió que el producto de la gestación merece una protección que incrementa en el tiempo (…) precisó que esa protección no puede desconocer los derechos de las mujeres y personas gestantes a la libertad reproductiva».
Las muertes violentas por razón de género se incrementaron en un 2.2% interanual en los primeros ocho meses de 2020, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, a 645 casos en el periodo.
De acuerdo con la normativa oficial de nuestro país, la muerte violenta de las mujeres por razones de género está tipificada como feminicidio. Así, este delito supone, en nuestro sistema penal, la forma más extrema de violencia contra la mujer y una de las manifestaciones más graves de la discriminación hacia ellas.