En esta época del año es común que rompamos la rutina de nuestras actividades cotidianas debido al periodo vacacional y las celebraciones.
Existen riesgos adicionales para nuestra salud en varios aspectos:
- Nos exponemos a cambios de clima sin las debidas precauciones o cuando menos las habituales, permanecemos en aires acondicionados más tiempo, nos dejamos la ropa mojada hasta que se seca en el cuerpo aún cuando la temperatura baja y nos mojamos más ocasiones en un día de lo que hacemos en una semana.
- Consumimos alimentos sin control de calidad, muchas veces de manera involuntaria y otras aún sabiendo el riesgo que se minimiza por la circunstancia vacacional (botanas o bocadillos en la playa). Duplicamos o triplicamos el tipo de comida con contenidos calóricos y de grasa muy superiores. La cantidad de alcohol que tomamos es mucho más cuantiosa y el volumen de agua natural se reduce significativamente .
- Exponemos nuestra piel a los efectos de la radiación solar, la voracidad de los mosquitos, untamos productos no certificados o autorizados para el broceado, como repelente de moscos o para protección solar.
- Podemos pasar largos periodos en cama sin activarnos, o excesivos espacios de actividades a las que no estamos acostumbrados. Podemos someterlos a deshidratación por sol, o sobre calentamiento, saunas y vapores sin verificar si nuestras condiciones de salud no se ven afectadas por estos eventos.
Lesiones musculares, quemaduras en la piel, múltiples ronchas por picaduras de insectos, incremento de peso, aumento de los niveles de azúcar, colesterol, triglicéridos, presión arterial, cuadros de Dengue, virus del Zica, Chikungunya, infección por rascado de ronchas, quemaduras por gelatinas marinas o infección de senos para nasales por agua de alberca o mar contaminada, infecciones gastrointestinales o cuadros respiratorios. La gama de repercusiones es amplia sin hablar de los accidentes por transportación, consumo de alcohol y/o drogas.
No es tan complicado sobrevivir a todos estos riesgos, las medidas generales de nuestra vida cotidiana son bastante efectivas, el secreto es no romper la regla:
A. Cubre tu piel del sol usa ropa delgada y fresca que cubra lo más posible, recuerda que el efecto de la radiación es acumulativo y puede mutar las células hacia el cáncer. Aplica protector solar a prueba de agua certificado de patente 30 minutos antes de ingresar al agua, vuelve a aplicar si permaneciste mucho tiempo humedecido o si frotaste tu cuerpo con toallas, cubre la cara todo el tiempo posible de los efectos del sol, recuerda que al bajar el sol y entre 4 y 6 pm atacaran los mosquitos, si estás junto a una laguna o manglar esto puede suceder todo el día, así que repite la aplicación cada 4 horas.
B. Seguro modificaras el tipo de consumo de alimentos, come menores porciones de los mismos, esto ayuda a la digestión e impacta de menor forma a tu metabolismo. Camina 10 minutos después de cada comida, no consumas postres en los 3 alimentos elige hacerlo solo en uno y trata de que este sea pequeño. No dejes de alimentarte con ensaladas y comer crudites, esto ayuda a que se absorba menos grasa y azúcar. Recuerda consumir 4 diferentes verduras por día y de 4 diferentes frutas porciones pequeñas. Toma de un promedio de 2 litros de agua natural por día para mantener una buena hidratación, evita tener sed. Limita tus consumos de alcohol, no lo hagas todo el día, y modera la cantidad a no más de 3 copas en 24 horas.
C. Retira la ropa mojada después de nadar o estar en alberca, nada por lo menos 10 minutos sin detenerte de cualquier estilo, retira la sal de tu piel en una regadera después de nadar, apaga aire acondicionado después del baño caliente en tu habitación, lleva a la playa una prenda de manga larga para cubrirte después de que se oculte el sol al atardecer, que también ayudará a la protección contra los moscos.
D. Si padeces alguna enfermedad lleva tus medicamentos y respeta los horarios, no consumas alimentos que te descompensen, no repitas transgresiones a tu dieta en el mismo día, respeta los consumos de sal y azúcar, evita grasas o limita el consumo y volumen de las mismas.
E. Si presentas diarrea puede ser la respuesta a un exceso de alimentos difíciles de digerir o excesivamente grasosos, irritantes o condimentados.
F. Trata de usar las escaleras, caminar en la playa, dormir un promedio de 7 horas y realizar 15 minutos de gimnasia antes de bañarte, protege tu pelo del sol, nunca uses coroneles para limpiar tus oídos, lava tus dientes después de cada alimento y si tienes agruras no consumas alcohol durante todo ese día, agregando un antiácido después de los alimentos. Si tienes dolores musculares por exceso de ejercicio, los ejercicios de estiramiento son de gran ayuda.