Recientemente se dio a conocer a los medios que Ticketmaster estaría en la mira de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), quien se sabe los exhortó a esclarecer qué fue lo que pasó con la venta masiva y descontrolada de boletos para el concierto de Bad Bunny en el Estadio Azteca, Ciudad de México (CDMX).
En ese sentido, pese a las declaraciones de la plataforma dedicada a la venta y distribución de boletos, Profeco asegura que el problema radicó en la sobreventa de boletos y no necesariamente en la clonación de estos, como Ticketmaster aseguró a sus consumidores.
A todo esto, Profeco explicó que hasta el momento ya cuentan con más de 1,600 quejas por parte de usuarios que buscan recibir un 120% como reembolso, es decir, 100% del costo del boleto original que no pudieron usar a la hora de acudir al concierto y 20% extra como un pago por indemnización.
Por su parte, Ricardo Sheffield, titular de la Profeco, alentó a los usuarios a formar parte de esta denuncia contra el abuso de confianza de Ticketmaster, quien quizá por problemas en su plataforma o con un dolo consciente desde un principio, sobrevendió cantidades inmensas de boletos.
Aún si no se ganase la demanda contra la plataforma, esta deberá responder por sus acciones devolviéndole el dinero a los usuarios estafados y en adición, ser penalizada con una multa millonaria.