Sadquiel tiene apenas un añito y ya sabe lo que es la violencia en carne propia, pues fue mordido en 16 ocasiones en diferentes partes de su cuerpo, esto mientras el pequeño estaba en la estancia infantil «Bambi» de SEDESOL en el municipio de Pueblo Nuevo, en el estado de Durango.
Lo triste y lamentable del caso parte de la agresión, es que no hubo empleado o trabajador del lugar que lo impidiera y aseguran «que no se dieron cuenta» que estaba siendo mordido.
Rosa Isela Rodríguez Lares, la mamá de Sadquiel, afirma que cuando fue a la guardería por su pequeño, lo encontró mordido, principalmente en la cara, piernas y brazos, por lo que acudió de inmediato a interponer una denuncia en la presidencia municipal y en el Ministerio Público, así como una queja ante la SEDESOL, pues la guardería recibe apoyo de esa dependencia.
¿Que dicen en la guardería?
Según ellos, no pudieron hacer nada por separar a los niños, pues dicen que la agresora fue una niña de tres años, y cuando sucedió la encargada del salón estaba cambiándole el pañal a otro niño.
Se supone que el bebé debió haber llorado desde la primer mordida ¡y fueron 16 mordidas!…¿nadie lo escuchó?…¿o ignoraron los gritos de terror del pequeño?
Fuente:ElDebate