La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado el primer caso humano fatal de infección por influenza aviar AH5N2 en México. Un hombre de 59 años, originario de la zona metropolitana de la Ciudad de México, falleció tras desarrollar síntomas graves. Este caso marca una preocupante novedad en el ámbito de las enfermedades infecciosas.
El paciente, que había estado postrado en cama durante tres semanas debido a múltiples condiciones médicas subyacentes, comenzó a sentirse mal el 17 de abril. A pesar de sus síntomas —fiebre, dificultad para respirar, diarrea, náuseas y malestar general—, esperó una semana antes de buscar atención médica. Trágicamente, murió el mismo día de su ingreso al hospital.
Las autoridades sanitarias han llevado a cabo una exhaustiva investigación, examinando a 17 personas que estuvieron en contacto cercano con el paciente en el hospital. Afortunadamente, todas las pruebas resultaron negativas para la influenza aviar. Además, 12 personas que vivían cerca del paciente, incluyendo siete con síntomas de enfermedad, también fueron sometidas a pruebas y dieron negativo.
Actualmente, se están realizando análisis de sangre para detectar anticuerpos contra el virus, lo que podría revelar si alguna de estas personas tuvo una infección previa. La fuente de exposición al virus en este caso aún se desconoce, y las autoridades subrayan que el individuo no tenía antecedentes de contacto con aves de corral u otros animales.
La cepa AH5N2, aunque reportada previamente en corrales de aves en México, no se había registrado antes en humanos. Este evento subraya la posibilidad de un alto impacto en la salud pública, dado el potencial de propagación del virus a humanos.
La situación se diferencia de la cepa H5N1, que ha causado infecciones en vacas lecheras y en tres personas en Estados Unidos este año. Desde 2022, la gripe aviar H5N1 ha infectado a más de 90 millones de pollos, más de 9 mil aves silvestres y 67 rebaños lecheros en Estados Unidos, además de una persona que estuvo expuesta a aves de corral y tres personas en contacto cercano con ganado infectado.
La OMS y las autoridades de salud mexicanas continúan monitoreando la situación de cerca, alertando sobre la necesidad de estar vigilantes ante la aparición de nuevos casos y la potencial amenaza para la salud pública global.