Con 8,772 personas contagiadas y 712 defunciones, hasta el último corte, autoridades de la Secretaría de Salud decretaron la Fase 3 de la epidemia en México, etapa con el pico más alto de casos y hospitalizaciones.
Al comenzar la epidemia de COVID-19 en nuestro país, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, indicó que se visualizaron tres fases para la propagación del virus.
De acuerdo con lo señalado a la Fase 3 desde entonces, ésta indica que se registra una propagación extensa, por lo que miles de personas resultan afectadas con el virus, algo que la hace la parte más complicada para garantizar personal e insumos suficientes en el sector Salud.
Actualmente, en el país hay cuatro regiones que supera los 1,000 casos y en el centro de México hay más de 4,000.
Puesto que las cadenas de propagación resultan difíciles de romper, hecho que requiere de estrategias drásticas, las actividades continúan en suspensión.
Durante la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, López-Gatell informó que se seguirá con las medidas de la Jornada de Sana Distancia ya establecida.
En su momento, López-Gatell apuntó que la Fase 3 llegaría con la de «máxima transmisión, la de máximos casos por día; y el riesgo es que se sature el sistema de salud, a pesar de la expansión que se ha hecho con apoyo de las fuerzas armadas».
Así, la fase recién declarada supone que el virus se encuentra en todo el país y en el peor escenario debido al número de contagios.
Pese a las predicciones de los académicos, que indicaban que la Fase 3 podría presentarse durante la primera y segunda semana de mayo y llegar hasta finales de junio como el momento del descenso de la transmisión del COVID-19, esta ya ha iniciado y se espera que este martes sean dados a conocer los detalles de su acuerdo.