El gobierno de México dijo el lunes que elaboraría un plan para ayudar a migrantes varados en el país como resultado de las políticas del presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, y reiteró que la nación no es culpable de los flujos de personas que la atraviesan con dirección al norte.
La Secretaría de Gobernación aseguró que, junto con la Cancillería, buscaría planes de apoyo para los migrantes varados en la frontera entre ambos países, como parte del programa «quédate en México», luego de que el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, se comprometió a desmantelarlo.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, comentó durante una reunión virtual con embajadores y cónsules que, para afrontar el desafío migratorio, contemplan trabajar en conjunto con los gobiernos de El Salvador, Guatemala, Honduras -de donde proceden la mayoría de migrantes- así como con Estados Unidos.
«No somos la causa del problema, pero reiteramos nuestra voluntad para ser parte de la solución», aseguró Sánchez.
Como parte del programa Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en Inglés), miles de inmigrantes han permanecido por largo tiempo en México, mientras Estados Unidos procesa sus solicitudes de asilo.
«Formularemos un plan respecto de los migrantes que aún permanecen en México con este programa», agregó Sánchez, sin dar mayores detalles. «Es previsible que en el futuro lejano se observe un incremento en los flujos de personas migrantes que buscarán llegar a los Estados Unidos a través de México».
Mientras México celebraba su adhesión al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas como miembro no permanente, para el periodo 2021-2022, el gobierno dijo que trabajaría para tomar medidas más enérgicas contra el tráfico de armas, un tema que, a menudo, ha tratado con Washington.
Información de Reuters