El diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, médico y legislador federal, denunció que el presupuesto de egresos 2026 aprobado por Morena y sus aliados representa un recorte histórico al sector salud, equivalente a 94 mil millones de pesos menos que el último presupuesto ejercido por el expresidente Andrés Manuel López Obrador en 2024.
A través de un análisis publicado en sus redes sociales, el doctor Éctor Jaime exhibió cómo el discurso oficial del “fortalecimiento del sistema de salud” contrasta con los números reales, que evidencian una reducción drástica en la inversión, la eliminación de programas clave y el desmantelamiento progresivo de la Secretaría de Salud.
“Morena miente. El presupuesto 2026 para salud no crece: cae 94 mil millones de pesos respecto a 2024, y desaparecen 11 programas esenciales como los de obesidad, VIH y vigilancia epidemiológica. No hay prioridad en la salud, hay abandono”, denunció el legislador.
De acuerdo con los datos difundidos, el presupuesto total del sector salud fue de 1 billón 82 mil millones de pesos en 2024 (ajustado a la inflación). En 2025 cayó a 945 mil millones, y aunque para 2026 sube ligeramente a 987 mil millones, sigue siendo menor en términos reales que el último año del sexenio anterior.
La Secretaría de Salud (SSA) es una de las más afectadas: pasa de un presupuesto de 95,825 millones en 2024 a solo 59,000 millones para 2026, un recorte superior a 36 mil millones de pesos, lo que representa una reducción del 38%.
Además, la dependencia perderá 11 programas clave, entre ellos los dedicados a:
- Prevención de obesidad y sobrepeso,
- Atención y control de VIH y otras infecciones de transmisión sexual,
- Vigilancia epidemiológica,
- Promoción de la salud, y
- Atención a enfermedades crónicas no transmisibles.
Con esta reestructura, la Secretaría pasará de 27 a solo 16 programas operativos.
Mientras tanto, el gobierno argumenta que el IMSS-Bienestar compensará los recortes, pero el propio legislador advierte que este organismo no tiene atribuciones para realizar vigilancia epidemiológica, coordinar programas de vacunación o implementar estrategias contra el sobrepeso, funciones que ahora quedarán desarticuladas o bajo control político de la Secretaría del Bienestar y los llamados “Servidores de la Nación”.
“Están desmantelando la Secretaría de Salud. No se trata de eficiencia, se trata de control. Los programas de atención médica casa por casa no son política pública: son propaganda electoral”, puntualizó Éctor Jaime.
La oposición en la Cámara de Diputados votó en contra del paquete presupuestal al considerar que el modelo propuesto pone en riesgo la prevención, la cobertura médica y la salud pública, mientras concentra recursos en programas clientelares sin resultados comprobables.

