El Gobierno venezolano rechazó este viernes las nuevas sanciones impuestas por Estados unidos contra el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (BANDES) y otras cuatro instituciones financieras del país, y ha calificado las medidas de «coercitivas, arbitrarias e ilegales».
El Ministerio de Asuntos Exteriores venezolano indicó en un comunicado que la intención de estas nuevas sanciones es «cercenar el derecho de las venezolanas y venezolanos a su desarrollo integral y a la sostenibilidad de su sistema financiero nacional e internacional».
Venezuela destacó que la medida afecta a más de 23 millones de clientes en el país.
Por esto, el Ministerio aseguró que «ninguna acción supremacista desesperada, logrará quebrantar la voluntad del pueblo venezolano».
Como consecuencia de las medidas, los activos de estas entidades financieras bajo jurisdicción estadunidense quedan bloqueadas y las empresas y personas de la potencia norteamericana tienen prohibido hacer negocios con ellas.