El ataque de Noroña y la gravedad del discurso
Gerardo Fernández Noroña, entonces diputado y actualmente senador, sostuvo en un evento en Tlaxcala en octubre de 2019 que la diputada Adriana Dávila era “más bocona que la chingada” y añadió: “pásenme elementos para ponerle una chinga la próxima vez que abra la boca”.
Violencia política de género acreditada
El INE determinó que estas expresiones constituyeron violencia política en razón de género. El mensaje fue claramente intimidatorio, utiliza lenguaje ofensivo y amenaza indirectamente, en un contexto de violencia hacia las mujeres en política. El TEPJF confirmó esta resolución y ordenó una sanción, además de pedir a la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados que exhortara a Noroña a evitar discursos que reproduzcan estereotipos de género nocivos.
¿Por qué es tan grave?
- Violencia política de género: Se instrumentaliza el poder como hombre para agredir verbalmente a una mujer, intentando silenciarla con violencia simbólica.
- Normalización misógina: Mensajes como “ponle una chinga” refuerzan la idea de que las mujeres deben callarse si incomodan al poder.
- Un mal precedente: Cuando un legislador agrede con ese tipo de lenguaje, no solo ataca a una persona, siembra para el resto de la política la idea de que así se legisla “fuerte”.