Este miércoles, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que la esperada reforma a las pensiones será presentada en septiembre. La propuesta, que entraría en vigor a principios del próximo año, incluye medidas significativas como la ampliación de los apoyos económicos a mujeres de 60 a 64 años, una iniciativa impulsada por Claudia Sheinbaum, virtual mandataria electa.
En su habitual conferencia matutina, López Obrador detalló que la reforma busca ajustar la edad para recibir la pensión universal. Originalmente, la pensión se entregaba a partir de los 68 años, pero desde hace unos años, esta se distribuye a partir de los 65 años. La propuesta actual pretende oficializar este cambio en la Constitución, estableciendo la pensión universal a partir de los 65 años para todos los adultos mayores.
«Inicialmente se estableció la pensión para adultos mayores de 68 años, pero desde hace dos, tres años, se entrega a partir de los 65 años. Ahora, queremos corregir esto en la Constitución«, afirmó el presidente.
Una de las novedades más destacadas de esta reforma es la inclusión de la propuesta de Claudia Sheinbaum, que sugiere otorgar apoyos económicos a mujeres de 60 a 64 años. Esta medida busca reconocer y apoyar económicamente a un segmento de la población que a menudo enfrenta dificultades económicas.
Además, Sheinbaum ha propuesto que todas las becas de nivel básico sean universales, beneficiando a todos los estudiantes de preescolar, primaria y secundaria en escuelas públicas. «Claudia quiere que todos los estudiantes en escuelas públicas de nivel básico reciban una beca. Actualmente, alrededor de 600 mil jóvenes están recibiendo este apoyo», señaló López Obrador.
Otro componente crucial de la reforma es la extensión de las pensiones universales a personas con discapacidad. López Obrador explicó que, anteriormente, la pensión solo se otorgaba a niños y jóvenes hasta los 29 años, dejando fuera a los discapacitados de 29 a 64 años. Gracias a un acuerdo con los gobiernos estatales, se logró que ambos niveles de gobierno compartan el costo de esta pensión al 50%.
«Ahora, la pensión para discapacitados será universal. Los gobiernos estatales aportarán el 50% y nosotros el otro 50%«, indicó el presidente. Además, se propondrá al Congreso que se garantice no solo el derecho a la pensión, sino también el acceso a terapias para personas con discapacidad, especialmente para niñas y niños.
La reforma a las pensiones representa un avance significativo en los esfuerzos del gobierno mexicano por lograr una mayor justicia social. Con estas medidas, se busca asegurar que los segmentos más vulnerables de la población, como las mujeres mayores y las personas con discapacidad, reciban el apoyo necesario para vivir con dignidad.
La presentación de esta reforma en septiembre marcará el inicio de un proceso legislativo que, de ser aprobado, transformará la vida de millones de mexicanos. La colaboración entre el gobierno federal y los estatales será clave para el éxito de esta ambiciosa iniciativa.