“Para una relación ese muro no existe, para el amor no hay fronteras”, dijo la novia Evelia Reyes, que llegó con su tradicional vestido blanco a la Puerta de la Esperanza. Ese lugar se localiza en un sector de la valla que ya divide a Estados Unidos de México, y que este sábado fue abierto por la patrulla fronteriza estadounidense.
Evelia es originaria de Guerrero y a su ahora esposo, al que identificó sólo como Brian, lo conoció en Tijuana hace tres años, pero no puede vivir con él en Estados Unidos porque ella no tiene papeles. Los casó un juez mexicano.
Un abogado de migración acompañó a ambos integrantes de la pareja, que esperan que, ya casados, puedan solicitar la residencia de la mujer en Estados Unidos.
La Puerta de la Esperanza fue abierta por mediación de la organización binacional de defensa de los inmigrantes Ángeles en el marco del Día Universal del Niño, que se celebra cada 20 de noviembre, para que se reunieran 12 familias, expuso Enrique Morones, líder de la asociación.
Con información de Animal Político