La inmigrante mexicana Jeanette Vizguerra, quien desde febrero pasado permanecía refugiada en una iglesia de Denver para evitar ser detenida por autoridades migratorias de Estados Unidos, abandonó este viernes el recinto, luego de recibir una suspensión de deportación por casi dos años.
Vizguerra permaneció en la iglesia un total de 86 días guarecida en su interior y al salir, la mañana de este viernes, fue acompañada por de más de una veintena de amigos y familiares, que la recibieron en el exterior del templo con gritos: “Si se pudo, Si se pudo!!!”.
“Han sido tres meses muy difíciles, porque aunque he seguido luchando desde dentro, mis hijos me hacían falta, por ellos es mi lucha, pero al mismo tiempo también por todas esas madres y padres que están pasando por la misma situación que yo”, declaró la mujer emocionada.
El pasado 20 de abril, la revista Time incluyó a Vizguerra en la lista de las 100 personas más influyentes en el mundo en 2017, al valorar sus años de lucha como inmigrante en Estados Unidos.
Con información de La Jornada