El Estado Islámico destruyó ayer en Mosul la histórica mezquita de al-Nuri, célebre por su alminar inclinado.
La edificación dio a la ciudad el apodo de al-Hadbaa o «jorobada», tiene un valor simbólico por ser el lugar en el que el líder del EI, Abu Bakr al-Baghdadi, declaró el califato transfronterizo en Irak y Siria en 2014.
Las explosiones ocurrieron mientras las unidades de élite del Servicio de Combate al Terrorismo profundizaban su batalla para retomar la Ciudad Vieja de Mosul y se encontraban a unos 50 metros de la mezquita.
Horas antes, las fuerzas iraquíes anunciaron que habían comenzado a avanzar hacia la mezquita en una alianza liderada por Estados Unidos.
Con información de La Jornada