En un posicionamiento que resuena en la esfera educativa, la diputada morenista Adela Ramos Juárez, quien forma parte de la influyente Comisión de Educación, ha expresado de manera contundente su rechazo a los recién presentados libros de texto para el ciclo escolar 2023-2024. Esta destacada legisladora ha instado al Gobierno Federal a frenar su distribución inmediatamente, hasta que las condiciones sean propicias y los aspectos legales del proceso sean resueltos de manera adecuada.
Desde su perspectiva como maestra de educación básica, Ramos Juárez ha arremetido contra las autoridades educativas y gubernamentales por lo que califica como una posición «irreflexiva». En una conferencia de prensa que compartió con la diputada Olga Luz Espinosa Morales del PRD, Ramos Juárez explicó que estos nuevos libros de texto no solo presentan errores ortográficos y gramaticales, sino que también están imbuidos de intenciones dogmáticas y filosóficas que, según su opinión, conducen a un interés político, perjudicando los derechos de los niños y niñas.
Con un enfoque en la educación laica, gratuita y obligatoria, la diputada de Chiapas ha enfatizado en la necesidad de una revisión exhaustiva y profunda de los nuevos materiales educativos. Ramos Juárez ha impulsado una auditoría para asegurar la transparencia en los gastos relacionados con la elaboración de los libros de texto gratuitos y para identificar a los responsables de su contenido.
La legisladora también ha solicitado a la Comisión de Educación que involucre a todas las voces y convoque a comparecer a los involucrados en este proceso, abogando por un análisis imparcial que tenga en cuenta a todos los miembros de esta instancia legislativa.
Olga Luz Espinosa Morales, diputada del PRD, se ha unido al coro de voces críticas en contra de la distribución de los nuevos libros de texto gratuitos. Ella resalta que estos materiales presentan inequidades, especialmente en lugares donde el acceso a Internet y dispositivos digitales es limitado.
Esta controversia ha llegado hasta el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha anunciado la detención de la distribución de los libros en Chihuahua, en respuesta a una orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Aunque López Obrador ha asegurado que esta decisión es violatoria de la Constitución, se compromete a seguir el proceso legal para revertir la suspensión y garantizar el acceso educativo de los niños en Chihuahua.
Esta postura contundente y fundamentada de la diputada Adela Ramos Juárez genera un debate crucial en el ámbito educativo, abriendo interrogantes sobre la calidad, la intención y la adecuación de los nuevos libros de texto en el sistema educativo mexicano.