Trabajadores de poderes del Estado oaxaqueño acusaron directamente al gobernador Gabino Cué Monteagudo del supuesto mal uso de esos recursos y porque dejó de pagar deudas de éstos a terceros institucionales y no institucionales por más de 177 millones de pesos. En forma de protesta tomaron este viernes instalaciones de la Ciudad Administrativa y Judicial, donde operan secretarías estatales.
Las acusaciones también se dirigen el líder sindical Felipe Cruz Pinacho, porque consideran permitió el desvío de recursos y encubrió la situación.
Los empleados manifestantes explicaron que el problema surgió porque en años anteriores la administración de Gabino Cué utilizó como «caja chica» el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca. Con la entrega de la rectoría de la educación a la Federación, ya no pueden echar mano de esos recursos y por lo tanto creen que comenzó a tomar del fondo de pensiones y jubilaciones de los trabajadores del estado.
Con información de La Jornada