Con el objetivo de prevenir enfermedades gastrointestinales en la población, el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Salud local (SEDESA), recomienda tomar las siguientes consideraciones para el consumo de pescados y mariscos, el cual incrementa durante la temporada de Cuaresma.
La carne de pescado debe ser firme y no debe sumirse al oprimirla, con un olor agradable y fresco; las escamas tienen que estar bien adheridas; las agallas deben ser de color rosado o rojizo, y los ojos deben estar saltones, brillantes y transparentes.
Si el consumidor detecta en los pescados y mariscos ojos hundidos y pupilas grises; agallas cafés o amarillentas, o bien que la carne es blanda y sin consistencia, se debe descartar su adquisición y consumo.
Dichos alimentos deben consumirse en establecimientos que cuenten con óptimas medidas de higiene.
Los locatarios, expendedores y preparadores de alimentos de mar, deben realizar medidas preventivas como lavarse las manos con agua y jabón antes de comenzar a manipular cualquier alimento o cuando se cambie de actividad; usar cubre bocas, así como delantal y proteger el cabello con una red durante el proceso de manipulación del producto para evitar el contacto con la ropa y la posibilidad de que caigan cabellos sobre los alimentos.
No deberán utilizar anillos, pulseras o cualquier tipo de joyería mientras se manipulan alimentos; limpiar y desinfectar el área de servicio; usar trapos de cocina distintos, uno para secar y otro para limpiar. Higienizar y desinfectar todos los utensilios, el agua que se utilice para lavar, deberá ser potable y corriente, porque su efecto de arrastre disminuye la presencia de contaminantes.
La SEDESA, a través de la Agencia de Protección Sanitaria, encabezada por José Jesús Trujillo Gutiérrez, realiza, de manera permanente, operativos de verificación sanitaria en más de 300 mercados que existen en la ciudad, así como en establecimientos dedicados a la preparación y venta de pescados y mariscos.
Esto, con el objetivo de fomentar entre los locatarios buenas prácticas de higiene, que garanticen la salud de los consumidores. Actualmente, se han otorgado 10 mil reconocimientos a quienes tomaron dicha capacitación.
Durante la temporada de Cuaresma se intensifican las acciones, para ello se realizan análisis de muestras de alimentos de mar crudos y cocidos para verificar el estado de conservación y detectar aquellos lugares que no cuentan con las medidas básicas de higiene.
Las muestras son trasladadas al laboratorio de Análisis de Riesgos, ubicado en el Hospital de Especialidades Dr. Belisario Domínguez, para identificar la presencia de microorganismos patógenos e indicadores de higiene, y de ser el caso, incautar los alimentos contaminados y evitar que la población los consuma. Hasta el momento, no se han detectado indicadores de alerta.
Asimismo, personal de la Agencia de Protección Sanitaria distribuye información por medio de carteles y volantes, donde se explican recomendaciones de cómo identificar que los productos se encuentran en buen estado de conservación.
En caso de presentar síntomas de enfermedad gastrointestinal como diarrea y vómito, la población puede comunicarse a la Línea de la Salud, Medicina a Distancia 5132-0909 o acudir de inmediato al Centro de Salud más cercano, así como evitar auto medicarse.
Con información de: CDMX