Autoridades fronterizas estadounidenses revisan redes sociales, correos electrónicos, mensajes de texto, videos y fotografías en celulares de personas que quieren ingresar al país norteamericano.
Las medidas se adoptaron luego que el FBI y otras agencias gubernamentales no lograran detener ciudadanos estadounidenses potencialmente peligrosos. De esta manera, agentes piden a viajeros entregar sus celulares en aeropuertos y puntos de control por tierra y solicitar las claves de redes sociales para poder examinar su contenido.
Este tipo de inspecciones se han quintuplicado en un año al pasar de menos de 5 mil en 2015 a 25 mil en 2016, según datos del Departamento de Seguridad Nacional.
John Kelly, secretario de Seguridad Nacional, dijo que esta medida era parte de los intentos gubernamentales para reforzar la seguridad fronteriza.
Con información de López Dóriga