Para las calificadoras económicas, México debe ser prudente con su economía y tomar con cautela movimientos de la administración del próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La agencia Fitch Rating rebajó la perspectiva de México de estable a negativa, una señal de que también podría rebajar su calificación crediticia en los próximos meses.
Fitch Rating señala que el triunfo de Trump en las elecciones aumenta la incertidumbre en los mercados mexicanos y la volatilidad de los precios de activos, sumado a indicadores internos débiles. A esta agencia le preocupa sobre todo los cambios y la cancelación en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
“Los intentos de renegociar el Tratado o inhibir la actividad de subcontratación por parte de EE UU hacia México podrían resultar perjudiciales para el sector mexicano de exportación manufacturera y afectar negativamente al empleo, la inversión (incluyendo la inversión extranjera directa) y el crecimiento económico del país”, expresa la agencia.
El consumo interno no consigue despegar y los precios del petróleo todavía no se recuperan lo suficiente de la estrepitosa caída de 2014. La incertidumbre ante la Administración de Trump ya ha afectado al peso mexicano que perdió el 10 por ciento de su valor.
Con información de El País