Nuevo aeropuerto avanza pese a COVID-19

Recientes

Explotación laboral de personas campesinas migrantes en invernaderos de Canadá

En Canadá hay invernaderos altamente tecnificados y productivos para cultivar frutas, verduras, flores y recientemente cannabis; pero no se sostienen sin las...

Hijo del ‘Profesor Jirafales’ revela toda la verdad sobre su muerte

Rubén Aguirre, el inolvidable ‘profesor Jirafales’ de El Chavo del 8, falleció el 17 de junio de 2016, a los 82 años, en Puerto Vallarta. Oficialmente, su pa...

Estados demócratas impugnan reforma electoral de Trump

La propuesta del presidente Donald Trump para reformar el sistema electoral en Estados Unidos enfrenta una fuerte oposición legal. Fiscales generales de 19 e...

Sener revisará metodología del precio del gas LP

Sener anunció que evaluará posibles modificaciones en la metodología para fijar el precio semanal del gas LP, con el objetivo de proteger tanto la operación....

ALERTA. ¡Otra vez el COVID! La nueva variante NB.1.8.1 ya está en 22 países

Cuando muchos ya pensaban que el COVID estaba más que controlado, llega una nueva variante a mover el tablero: NB.1.8.1. Fue detectada por primera vez en ene...

Compartir

La economía de México prácticamente se ha paralizado y ha puesto en jaque el mercado laboral por la epidemia del coronavirus, pero en el proyecto gubernamental del nuevo aeropuerto de Ciudad de México decenas de miles de trabajadores continúan con sus faenas todo el día para terminarlo a tiempo.

Cuando el Gobierno ordenó el cierre de actividades no esenciales para detener la propagación del virus, se hizo una excepción para los proyectos prioritarios de infraestructura del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Estos incluyen el aeropuerto Felipe Ángeles en la base militar de Santa Lucía, una refinería en el puerto de Dos Bocas, en el Golfo de México, y el llamado Tren Maya, una línea de ferrocarril de 1,470 kilómetros que conectará puntos turísticos de la península de Yucatán.

A las empresas productoras de acero, cemento y vidrio -materiales empleados por esos proyectos-, también se les permitió continuar operando. Mientras que el sector automotor, aeroespacial, la minería y la construcción reiniciaron labores el 1 de junio.

«Hasta la fecha llevamos generados más de 26,000 empleos», dijo el mayor José Juan Marín, portavoz de la agrupación de ingenieros militares de Santa Lucía.

También te puede interesar:  Muere exsecretario Gerardo Ruiz Esparza

En un día nublado a principios de junio, miles de trabajadores con cascos y chalecos anaranjados, así como con mascarillas para protegerse del contagio del coronavirus, iban y venían colocando estructuras de acero del edificio terminal y alisando la superficie de una de las dos pistas.

Marín aseguró que hasta ahora no ha habido un brote del virus en el lugar debido a los protocolos de seguridad establecidos, que incluyen además del cubrebocas, tomar la temperatura de los empleados y hacer que la mitad de los que trabajan en oficinas lo hagan de forma remota.

López Obrador asegura que los proyectos son muy necesarios para la economía y una fuente importante de empleo, aunque muchos críticos piensan que esos recursos deberían ser utilizados para enfrentar la pandemia.

«Si la prioridad principal en este momento es frenar la crisis sanitaria, habría que buscar todos los recursos posibles», dijo Cuauhtémoc Cárdenas, tres veces candidato presidencial e hijo del exmandatario Lázaro Cárdenas. «Incluso, diría yo, pensar en diferir los megaproyectos y usar esos recursos».

Poderosos grupos de presión de la industria dicen que los proyectos no compensan la falta de un paquete de estímulo para evitar que las empresas se hundan y despidan trabajadores. Se espera que la segunda economía más grande de América Latina se contraiga este año cerca de un 10%.

También te puede interesar:  ¿Qué dice la SHCP sobre la caída de precios del petróleo?

López Obrador ordenó que la nueva terminal aérea fuera edificada sobre una base militar para ahorrar dinero después de cancelar la construcción de un fastuoso aeropuerto impulsado por su antecesor, argumentando que el plan era demasiado costoso y estaba plagado de corrupción.

Críticos dicen que la obra en Santa Lucía, más barata pero también más distante, condenará a la metrópoli de 23 millones de habitantes a un destino de retrasos y cancelaciones de vuelos interminables.

Pero al menos su construcción podría terminar a tiempo. Nueve meses después de iniciadas las obras, el proyecto del aeropuerto, que inicialmente tendrá una capacidad anual de 20 millones de pasajeros, lleva alrededor de un 20% de avance y se espera que esté terminado para marzo de 2022.

«Es una fecha que vamos a cumplir sin problema alguno», dijo Marín.

Información de Reuters

Comentarios