El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, anunció este viernes que ofrecerá 4.000 empleos en la frontera sur a los migrantes centroamericanos que están cruzando Guatemala en caravana y que, se espera, cruzarán a México este fin de semana.
«Tenemos más de 4.000 empleos, ahí, en la frontera sur, disponibles. Desde luego, (también ofrecemos) albergues y atención médica, todo. Pero trabajo, en nuestro país. Se ofrece eso, y lo mismo para nuestros connacionales», expresó el mandatario en la conferencia matutina desde Palacio Nacional.
Guatemala informó este jueves del paso de más de 2.000 migrantes hondureños miembros de una nueva caravana con rumbo a Estados Unidos en los últimos dos días a través de dos puestos fronterizos.
El Ejecutivo mexicano tiene contabilizadas entre 2.500 y 3.000 personas de Honduras y El Salvador que «vienen en caravana», precisó López Obrador.
«Unos quieren entrar por Tapachula (Chiapas) y otros por El Ceibo, Tenosique», en el suroriental estado de Tabasco, detalló el líder de Movimiento Regeneración Nacional.
A continuación, les ofreció empleo: «Hay manera de que tengan trabajo, mi ideal es empleo pleno, trabajo a todos».
Con este nuevo plan de ofrecer trabajo a los migrantes, el Ejecutivo mexicano buscaría frenar su travesía hacia Estados Unidos.
En días recientes, Olga Sánchez Cordero, titular de la Secretaria de Gobernación, declaró que no se facilitarán visas para que los migrantes transiten regularmente por el país, pero se les atenderá siempre que soliciten asilo o refugio para permanecer en el territorio.
Esta nueva caravana migrante puede poner en riesgo las relaciones entre Centroamérica y México con Estados Unidos, que por el momento parece que se ha posicionado públicamente sobre el tema.
No se descarta que en los próximos días parta al menos otra caravana desde Honduras, según se refleja en redes sociales.
En octubre de 2018 miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, empezaron a cruzar en caravana México para llegar a Estados Unidos.
A inicios de junio de 2019, y tras varias caravanas, Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo migratorio que evitó que el primer país impusiera aranceles a todos los productos provenientes del segundo.
A raíz de ello, México envió a las fronteras norte y sur a la recién creada Guardia Nacional, lo que ha provocado una reducción de cerca del 70 % del flujo migratorio.
Con información de EFE