El Vaticano ha protestado ante Italia por un proyecto de ley para combatir la homofobia, argumentando que en su forma actual podría restringir la libertad religiosa de la Iglesia Católica en el país.
La protesta, que fue reportada por primera vez por el Corriere della Sera el martes y confirmada por un funcionario del Vaticano, fue entregada el 17 de junio por el ministro de Relaciones Exteriores del Vaticano a la embajada de Italia ante la Santa Sede.
La protesta se refiere al denominado «proyecto de ley Zan», llamado así por Alessandro Zan, legislador homosexual del centroizquierdista Partido Demócrata. El proyecto ya fue aprobado en la Cámara baja del Parlamento y actualmente se está debatiendo en una comisión del Senado.
El Vaticano cree que la ley tal como está redactada actualmente viola los Pactos de Letrán de 1929, que establecieron a la Ciudad del Vaticano como un estado soberano y regula sus relaciones con Italia.
El Vaticano teme que la ley conduzca a la criminalización de la Iglesia en Italia por negarse a realizar matrimonios homosexuales, oponerse a la adopción por parejas homosexuales a través de instituciones católicas o negarse a enseñar teoría de género en sus escuelas, según una fuente vaticana.
Si bien el Vaticano ha condenado a menudo la discriminación y la violencia contra los homosexuales, también ha expresado su preocupación por cualquier tipo de teoría de género que difumine o elimine las diferencias entre hombres y mujeres.
En abril, los obispos católicos de Italia criticaron el proyecto, diciendo que «una ley que intenta combatir la discriminación no puede buscar ese objetivo a través de la intolerancia y cuestionando la realidad de la diferencia entre hombres y mujeres».
Los obispos dijeron que la ley no aborda de forma significativa la «singularidad de la familia» encabezada por una pareja heterosexual.
Información de Reuters