Primeras «jirafas enanas» en Uganda y Namibia

Recientes

¡Atención CDMX! Se esperan lluvias muy fuertes y descargas eléctricas este viernes 27 de junio

No guardes el paraguas: la Ciudad de México vivirá una jornada lluviosa este viernes 27 de junio, con tormentas que podrían causar encharcamientos, caídas de...

Centros comerciales se repliegan: baja confianza y consumo redefinen el retail en México

La ocupación de locales en malls cae a mínimos de cuatro años, mientras el consumo esencial domina la escena. En lo que va de 2025, los centros comerciales e...

Emergencias médicas en México por metanfetamina, alerta la ONU se han triplicado.

Entre 2020 y 2023, el número de tratamientos médicos por consumo de metanfetaminas en México se triplicó, pasando de 29 mil a más de 87 mil casos, según el I...

Anna Wintour deja el mando de Vogue tras 37 años, pero seguirá moviendo los hilos del poder en la moda

Anna Wintour, el rostro más reconocible e influyente de la moda editorial, dejará su cargo como editora en jefe de Vogue Estados Unidos, una posición que ha...

“¡No es broma! captan a un hombre trabajando dentro de un cajero de la CFE

Sí, aunque suene a escena de caricatura o película de ciencia ficción… esto pasó en la vida real, y pasó en México. En redes sociales se viralizó un video qu...

Compartir

Científicos de la Fundación para la Conservación de Jirafas (GCF, por sus siglas en inglés) han documentado por primera vez la existencia de dos jirafas enanas en Uganda y Namibia, confirmó en un comunicado la organización, que trabaja para la supervivencia de estos animales en 16 países africanos.

También te puede interesar:  Contraloría de Maduro inhabilita a Guaidó para ejercer cargos públicos

Una de las jirafas enanas, apodada Gimli por los investigadores en honor al personaje de ficción de «El Señor de los Anillos», vive en el Parque Nacional Murchison Falls en Uganda, y la otra, Nigel, en una granja privada en el centro de Namibia.

También te puede interesar:  Cazadores matan a la última jirafa blanca de Kenia... y a su cría ¡infelices!
Comentarios