La situación de la salud en la población mexicana comparada con los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos de la que es miembro. La esperanza de vida de los mexicanos es la baja, 75 años, seis menos que el promedio en la agrupación.
La inversión en el sector salud se ha mantenido igual en los últimos 12 años, 6 por ciento del producto interno bruto, lo que explica que la probabilidad de muerte de los mexicanos en el primer mes posterior a un infarto al corazón es cuatro veces más alta.
En nuestro país ese riesgo es de 28.1 por ciento y el promedio de la OCDE está en 7.5, advierte el informe Panorama de la Salud 2017. Ian Forde, analista sénior de Política de Salud de la organización, presentó ayer los resultados y comentó sobre varios de los indicadores que dan cuenta del desempeño de los sistemas de salud de las naciones más ricas del mundo.
El especialista dijo que si bien las condiciones de México son distintas a las naciones europeas, Estados Unidos o Canadá, entre otros, el objetivo del reporte es compararlo con los mejores, dar pistas para investigar y que los distintos actores y tomadores de decisiones busquen los mecanismos para mejorar el sistema sanitario con mayor inversión y calidad de los servicios.
Según el informe, México es el peor calificado en casi todos los indicadores, salvo tres: tiene el menor nivel de tabaquismo y consumo de alcohol, así como la menor cantidad de ingresos a hospital por complicaciones de asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
En sobrepeso y obesidad, está en el primer sitio con más de 70 por ciento de la población en esta condición física.
Por otro lado, existen las carencias en aspectos como la detección temprana de cáncer de mama, principal causa de muerte por tumores malignos entre las mujeres. En los recientes dos años, 18 por ciento de la población en riesgo de desarrollar la enfermedad se ha realizado el estudio de mastografía, pero en la OCDE el porcentaje es de 60.8.
Respecto de la inversión en salud como porcentaje del PIB, el promedio en la OCDE es de 9 por ciento, mientras en Estados Unidos es 17.3; en Suiza, 12.4, y en Alemania, 11.3; Suecia y Francia están en 11 por ciento.
Otro dato revelador es el gasto que realizan las familias para atender enfermedades y que en México representa 41 por ciento del gasto en salud, mientras que en la OCDE equivale a 20 por ciento.
Con información de La Jornada