La historia de Geraldine Fernández: un cuento de Studio Ghibli que resultó ser falso

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Una historia que parecía ser de éxito y orgullo latino se desmoronó cuando se descubrió que Geraldine Fernández, una joven ilustradora colombiana, había fabricado su supuesta participación en «El niño y la garza», la más reciente película de Studio Ghibli.

La historia de Fernández se hizo viral después de que «El niño y la garza» ganara el Golden Globe 2024 a Mejor Película Animada. La joven afirmó haber dibujado 25 mil fotogramas para la película, lo que equivaldría a unos 30 minutos de la misma. Sin embargo, desde el principio, hubo señales de que algo no cuadraba en su relato.

Fernández aseguró que había trabajado de manera remota desde Colombia, algo que muchos animadores cuestionaron, dado que Studio Ghibli es conocido por su meticulosidad en todos sus proyectos. Además, afirmó que solo estuvo cerca del equipo del estudio en un par de ocasiones y que el propio Hayao Miyazaki se refería a ella como «la colombiana».

Sin embargo, la verdad salió a la luz cuando se descubrió que el nombre de Fernández no aparecía en los créditos de «El niño y la garza» ni en páginas especializadas, como IMDB o Anime Staff Database. Además, los documentos que presentó para respaldar su conexión con Studio Ghibli resultaron ser diplomas por participar en concursos de cerámica y una maestría en línea.

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La situación se agravó cuando se descubrió que Fernández había plagiado las ilustraciones de su portafolio y que había dado conferencias y cursos en Colombia, donde compartía su supuesta experiencia con Studio Ghibli.

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Tras la revelación de la verdad, Fernández y la empresa donde trabajaba, Tecnoglass, se vieron obligados a cerrar sus cuentas de redes sociales debido a la avalancha de críticas y memes. La historia de Geraldine Fernández es un recordatorio de que, aunque una mentira pueda volverse viral, la verdad siempre encuentra su camino.

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