El gobierno mexicano está preparado para enfrentar la posible imposición de aranceles del 25% a las exportaciones hacia Estados Unidos. Marcelo Ebrard Casaubón, titular de la Secretaría de Economía (SE), aseguró que no habrá reacciones precipitadas, sino un plan estratégico bien definido.
México, firme ante la incertidumbre
Ebrard destacó que el país ha estudiado y preparado cada escenario con anticipación. “Sorpresas no va a haber ni tampoco reacciones intempestivas. Habrá un plan”, afirmó tras participar en la 85ª Asamblea General Anual de la American Society (Amsoc).
La presidenta Claudia Sheinbaum ha propuesto una política de “firmeza y sangre fría”, que, según el funcionario, ya está dando resultados. Además, subrayó la importancia de la paciencia y la estrategia mexicana en este tipo de negociaciones.
Empresarios confían en la relación comercial
Larry Rubin, presidente de la Amsoc, consideró poco probable que el gobierno de Donald Trump aplique los aranceles. “Será un sábado cualquiera, que no va a haber aranceles”, señaló.
Sin embargo, advirtió que el presidente estadounidense podría utilizar esta medida como herramienta de presión en temas como narcotráfico y migración. Además, destacó que imponer aranceles a México podría generar una espiral inflacionaria en EE.UU.
Las inversiones se mantienen en México
Ante rumores sobre la salida de General Motors (GM) del país, Ebrard aclaró que la automotriz seguirá operando en México. “Van a hacer un ajuste, pero ya nos dijeron cómo se va a manejar. Nadie se va a ir porque las plantas más productivas están aquí”, explicó.
Rubin coincidió en que GM y otras empresas seguirán en México, siempre y cuando se mantengan condiciones competitivas y el respeto al Estado de derecho.
Un panorama de cautela y estrategia
México enfrenta este posible reto con preparación y confianza. La estrategia gubernamental y el respaldo empresarial refuerzan la estabilidad económica, mientras se espera la decisión final de la administración Trump.