Muchos padres se sorprenden y se inquietan al ver que sus hijos se tocan sus genitales. Es obvio que tu hijo va a descubrir sus genitales ya que al tocarlos experimentan sensaciones agradables y placenteras por eso los convierte en una zona de contacto muy atractiva. Esto no significa que sean precoces o que tengan alguna fijación o algo extraño.
Cuando lo hagan simplemente déjalos saciar su curiosidad sin regaños ni manazos sin pedirles» que no lo hagan», se que esta recomendación para algunos padres será inaceptable, pero en este caso el problema no lo tienen los hijos, lo tienes tú.
Si se toca a sí mismo delante de amigos o familia o en un ambiente inapropiado, simplemente atrae su atención hacia otra cosa, sin gritos y sin sustos. Solo distraerlo cada vez que la situación pueda ser incómoda para otros. Estoy totalmente de acuerdo con el respeto hacia los demás, pero eso no se hace que dicha exploración sea incorrecta o mal sana.
En el caso que descubras que a tus hijos «jugando al doctor» con otras amiguitas(os), simplemente por el hecho de sorprenderlos te aseguro que el susto será suficiente para que no se repita. Está bien que hables con tus hijos del respeto a su cuerpo y el de los demás, enfatiza en el cuidado que debe tener en su forma de jugar. Es muy importante que escuches sus inquietudes si es que las tiene.
Mientras más leve sea tu reacción, menos reforzaran esa conducta. Solo enfatiza en el cuidado que debe de tener con su cuerpo en un lenguaje que pueda entender.
El jugueteo genital infantil puede confundirse frecuentemente con la masturbación. No son lo mismo. Cuando un niño de 3 a 6 años juega con otro amigo o amigo desnudos o con sus propios genitales, se le llama jugueteo genital y es parte de su proceso de auto conocimiento y curiosidad.
Habla con el niño al respecto y si su jugueteo es público, entonces dile claramente que hay cosas que se hacen en privado y otras no. Ésta es privada. Si el jugueteo fuera compulsivo, entonces vale la pena el consejo de un especialista en la materia.
La masturbación es otro asunto. Su práctica se presenta en la adolescencia, y es normal que ocurra en ambos sexos, no es exclusivo de los varones. Lo que pasa es que los hombres son menos discretos que las mujeres.
La masturbación, según estudios médicos, no produce ningún daño. El daño solo existe en las ideas absurdas e ignorantes sobre el funcionamiento del organismo. Ideas dañinas e incluso absurdas como “si te masturbas demasiado se te seca el cerebro» «no podrás funcionar normalmente» entre otras tonterías.
Un joven debe liberar su energía sexual de alguna manera. Los adultos les decimos que no tengan relaciones sexuales y que además » no piensen en eso». ¿Qué alternativa le va a quedar? Es mejor dejarlo en paz. Que tenga discreción y punto. Respeta su intimidad y que él respete la de los demás.