La iniciativa, presentada por el senado panista Roberto Gil que sufrió diversos cambios, generó polémica entre legisladores de PAN, PRD y PT porque en su opinión el dictamen también beneficia a los concesionarios privados (Televisa y TV Azteca).
Esto, porque en se exime a estaciones complementarias o de baja potencia del retiro de la concesión y multas, si dejan de transmitir en el período de transición de señal análoga a digital.
La propuesta de reforma dividió a los perredistas, que públicamente se mostraron a favor y en contra, al sostener la michoacana Iris Vianey y Zoé Robledo que la intención es proteger a las audiencias de muy alta marginación, para quienes la única forma de comunicación es la televisión.
En contraste, la vicecoordinadora Dolores Padierna, sostuvo que al suprimir de la ley el término de «operadores» para establecer «estaciones de televisión y radiodifusión», implica que la medida aplicará no solo a las televisoras públicas sino privadas.
Así que «le pediría a la senadora Iris Vianey que no hable a nombre del Grupo Parlamentario que, como ella misma lo dijo, a nosotros no nos van a utilizar para luego ir a negociar, vayan ustedes a saber qué cosas».
Con información de Milenio