El director del Centro de Instrumentación y Registro Sísmico, Juan Manuel Espinosa, confirmó que los recursos fueron depositados el jueves por la tarde, sin embargo, calificó que la cifra es apenas un pequeño alivio debido a que desde hacer varios años se ha dejado de invertir en el mantenimiento de la red de sensores de Oaxaca.
“Podemos ahorita restaurar eso, pero es un ‘mejoral’ para un problema de otro tamaño. O sea, sí se requiere del servicio, tan se requiere que hoy el incidente nos deja ver que pudo haber sido menor si hubiéramos tenido todo funcionando”, aseveró.
El estado de Oaxaca tiene un adeudo de 24 millones de pesos con el Cires al periodo 2012-2014, explicó el director. Algunas de las consecuencias de esto han sido la falta de mantenimiento y que una antena repetidora, localizada en Corral de Piedra, dejara de funcionar desde principios del 2018.
A la antena repetidora de Corral de Piedra se suma la torre de San Antonio Cuajimoloyas que cayó esta semana debido a fuerte vientos provocados por el frente frío 25.
Las fallas en las antenas representan un riesgo para la Ciudad de México, ya que en caso de registrarse un sismo con epicentro en alguno de los 14 sensores que no están enviando señales actualmente, la alerta sísmica de la capital no se activaría.
“La restauración de las torres toma mucho tiempo, tres, cuatro semanas, y eso es muy inquietante por el tiempo, pero si logramos verificar la condición de enlaces redundantes y los recuperamos pronto podríamos tener en una semana la restitución de los llamados de esas estaciones que se perdieron”, finalizó Espinosa.
Con información de López Dóriga