La Asamblea General de la ONU adoptó la resolución A/S-30/L.1 que establece que los países miembros de la organización aceptan pasar de un régimen prohibicionista a uno de salud pública en el combate contra las adicciones a narcóticos.
El documento reconoce la importancia de incorporar adecuadamente las perspectivas de género y de edad en los programas y políticas públicas relacionados con las drogas.
En el debate se ratificó que se mantendrán las acciones para combatir el tráfico ilícito de estupefacientes, pero al mismo tiempo plantean acciones “operativas” que ponen énfasis en la atención del origen del problema.
Los países se comprometen a garantizar la reducción de demanda y oferta de drogas y la cooperación internacional para enfrentar el problema.
Con información de El Universal