El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, informó que México no cerrará fronteras ante la nueva variante de COVID-19: Ómicron, identificada por primera vez en Sudáfrica y clasificada por la OMS como «de preocupación».
En su cuenta oficial de Twitter declaró: «no se ha demostrado que sea más virulenta ni que evada la respuesta inmune inducida por las vacunas», pese a que reconoció la existencia de datos que sugieren que tiene mayor transmisibilidad. Los reportes internacionales han registrado que hasta el momento se sabe que es más trasmisible que Delta y hasta 500 veces más contagiosa que la cepa original.
«La información difundida sobre los riesgos de la nueva variante es desproporcionada respecto a lo que muestra la evidencia científica existente», agregó.
Por su parte, la Secretaría de Salud señaló: «Ante el reciente reconocimiento de Ómicron como una variante de preocupación por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Secretaría de Salud se encuentra actualizando protocolos de vigilancia genómica para la búsqueda intencionada de dicha variante. Así, en caso necesario, las medidas sanitarias que se tomen serán guiadas por la evidencia científica disponible».