El Gobierno de México condenó la separación de familias migrantes en Estados Unidos y consideró que es resultado de una política “cruel e inhumana”.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray, informó en un mensaje a la prensa que el Gobierno mexicano ya envió una nota diplomática con sus reclamos.
“No podemos ser indiferentes ante un hecho que claramente representa una violación a los derechos humanos y que pone en situación de vulnerabilidad a niños menores”, señaló.
Refirió hasta ahora sólo han identificado a 21 niños mexicanos separados de sus padres, cerca de un uno por ciento del total. Dijo que la mayoría provienen de Guatemala, El Salvador y Honduras.
En este sentido, dijo que México tiene facultades para ofrecer protección consular y «tenemos la voluntad para apoyar de manera clara a los gobiernos de estos tres países para enfrentar esta difícil situación».
Minutos después, el presidente estadounidense dijo que México «no hace nada por nosotros» para impedir que inmigrantes ilegales lleguen a la frontera con Estados Unidos.
Sobre las medidas que se han impulsado ante la política de ‘tolerancia cero’ impulsada por el Gobierno de Donald Trump, Videgaray informó que han reiterado a la red consular que mantengan contacto y presencia en los centros de detención y albergues.
También reconoció el trabajo que realizó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) con sus contrapartes de Colombia, Honduras y Ecuador en favor de los menores.
El canciller señaló que respeta a cabalidad la soberanía del Estado de Derecho de Estados Unidos. y que «el Gobierno mexicano no promueve la ilegalidad ni la migración ilegal».
Con información de El Financiero