Para el Fondo Monetario Internacional, nuestro país debe fortalecer su Estado de derecho, así como mejorar la gobernanza y el combate a la corrupción, la informalidad y la inseguridad, porque siguen obstaculizando el crecimiento económico y sin este marco de legalidad las reformas estructurales no darán el fruto estimado.
“La implementación del Sistema Nacional Anticorrupción es crítica. La lucha contra la corrupción aumentaría la productividad”, dijo Costas Christou, el jefe de misión del FMI que visitó el país para realizar el informe, conocido como Consulta del Artículo IV.
El organismo internacional mantuvo su proyección de una desaceleración a 1.9 por ciento del PBI, debido al impacto de la incertidumbre por las negociaciones del TLCAN que, de extenderse, tendrán un efecto significativo en la confianza del consumidor, los flujos de capital y el comercio bilateral.
No obstante, prevé que la economía mexicana podrá acelerarse a 2.7 por ciento recién en 2020, a medida que se resuelva la incertidumbre en torno al futuro de la relación comercial con Estados Unidos.
“Esta cifra refleja una aceleración significativa del crecimiento potencial debido a las reformas implementadas como parte del Pacto por México desde 2012. Aunque las reformas han logrado muchas de las transformaciones previstas en los sectores seleccionados, su impacto en el crecimiento aún no se termina de materializar”, dijo Costas Christou.
Con información de El Financiero