La Administración Trump planteó dudas sobre la capacidad militar de los transexuales. En una decisión polémica, el Pentágono suspendió la orden, que iba a entrar en vigor hoy, de abrir las fuerzas armadas a las personas transgénero.
“Desde que estoy en el puesto he enfatizado que el Departamento de Defensa y debe medir cada decisión política con un estándar crítico: ¿afectará a la disposición y letalidad de las fuerzas? Dicho de otro modo, ¿cómo influirá en la capacidad militar de defender la nación?”, afirmó el secretario de la Defensa, James Mattis.
La paralización del ingreso supone un revés a la política de integración impulsada Barack Obama. Antes de su presidencia, los transexuales eran clasificados como “desviados sexuales” y debían ser expulsados. Sin embargo, bajo su mandato, no sólo se les aceptó plenamente sino que se facilitaba su tratamiento completo.
“La decisión del general Mattis de mantener la prohibición de reclutar personas transgénero tendrá el efecto de que mientan en su intento de ingresar en las fuerzas armadas. Lo mismo ocurría antes con los homosexuales y la política del ‘no preguntes, no cuentes’. Todo esto carece de sentido porque, como predijeron todos los estudios, los transexuales han demostrado con creces su capacidad de servicio”, afirmó en un comunicado el centro de estudios sexuales Palm Center, que colabora con el Pentágono.
Con información de El País