Como un flagelo que no le da respiro a su ya golpeada economía, la inflación en Venezuela alcanzará el 1.000.000% a finales de este año, según lo revelaron las últimas proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) publicadas este lunes.
Tan grave es la situación del país latinoamericano, que la entidad la comparó con lo que vivió Alemania en 1923, durante su periodo de hiperinflación después de la Primera Guerra Mundial.
La cifra del nuevo pronóstico del FMI es abismalmente mayor a la de hace apenas tres meses, cuando proyectó que la inflación venezolana subiría en un 13.864%. Estamos hablando de dos dígitos más en el número.
“Prevemos que el gobierno seguirá registrando grandes déficits fiscales, financiados exclusivamente con la expansión de la base monetaria, lo cual seguirá alimentando la aceleración de la inflación a medida que la demanda de dinero siga desplomándose”, advirtió el FMI en su último reporte.
En este contexto, también el PIB caerá en un 18% durante 2018: es el tercer año consecutivo en que este indicador disminuye en dos dígitos, en parte gracias a la reducción “significativa” de producción de petróleo, de acuerdo al FMI.
Ahora, las condiciones que padece Venezuela no serán ajenas a los países vecinos. El organismo internacional sostuvo que los grandes flujos de migración –generados, entre otras circunstancias por el colapso de la actividad económica, la hiperinflación y la escasez de alimentos y medicinas– “intensificarán los efectos de contagio a países vecinos”.
De hecho, Colombia reportó la semana pasada que a su territorio llegaron 50.000 venezolanos en menos de un mes, consolidando un total de 870.093.
Con información de CNN En Español