El año pasado el gobierno gastó más de 10 mil millones de pesos en este rubro, «lo que equivale al presupuesto del mismo año que se ejerció para becas y apoyos del Conacyt», analiza Justine Dupuy, coordinadora del programa de rendición de cuentas y combate a la corrupción en Fundar.
En lo que va del sexenio el presupuesto para publicidad oficial está alcanzando más de 37 mil millones de pesos.
“Un gasto multimillonario que se hace en condiciones opacas y también sin rendir cuentas”, refirió.
Televisa y TV Azteca fueron las empresas que más recursos obtuvieron el año pasado, sumando un monto de 3 mil 148 mdp. Televisa recibió el 18.75 por ciento y TV Azteca el 10.6 por ciento del monto total del gasto en 2016. Es decir, 25 por ciento se va a las televisoras.
“El actual gobierno se ha caracterizado por los sobreejercicios en el gasto en materia de publicidad –71.86 por ciento más de lo aprobado por la Cámara de Diputados, lo cual equivale a más de 15 mil mdp adicionales-, en un periodo donde han existido recortes al presupuesto en sectores como salud, desarrollo social y medio ambiente“, apunta Fundar.
“Este sobreejercicio existe año tras año, se termina gastando mucho más en un rubro que no debería ser prioritario”, sostuvo Dupuy.
“Lo que hemos visto año tras año es que son más de mil proveedores (del gobierno)… la mitad de este gasto se concentra en 10 proveedores“, anotó.
Con la celebración de convenios con medios, el gobierno controla también la línea editorial e incluso “se crean medios que no tienen realmente contenido informativo pero sacan una renta del gobierno”, lo que calificó como “chayoblogs“.
De esta manera, el gobierno distorsiona el debate público porque no llega toda la información a los ciudadanos, afecta la línea editorial y aquellas medios que no están en esta órbita de control gubernamental no sobreviven.
Con información de Aristegui Noticias