Estados Unidos ha confirmado este viernes que enviará bombas de racimo a Ucrania, a pesar de las críticas recibidas tanto de Alemania como de organizaciones como Human Rights Watch (HRW), que expresan su preocupación por el impacto de este armamento en la población civil.
El presidente Joe Biden ha aprobado esta medida «tras una recomendación unánime», según informó el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, en una rueda de prensa. Sullivan afirmó que es una decisión que consideran «correcta».
Asimismo, señaló que los ucranianos han proporcionado garantías «por escrito» sobre el uso que darán a estas armas, con el objetivo de minimizar los riesgos para la población civil.
Las bombas de racimo forman parte de un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania, del cual el Pentágono brindará más detalles en el futuro, explicó Sullivan. El funcionario también destacó que Washington ha retrasado la decisión en la medida de lo posible, pero que las tropas ucranianas necesitan municiones.
Ahora bien, ¿qué son exactamente las bombas de racimo? Este tipo de armamento fue utilizado por primera vez durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Estas bombas están diseñadas para destruir múltiples objetivos militares dispersos, como formaciones de tanques o infantería, y causar daños o lesiones a los combatientes.
En concreto, consisten en un contenedor que se abre en el aire y dispersa numerosas submuniciones explosivas sobre un área amplia, alcanzando un radio de entre 200 y 400 metros.
Algunos modelos pueden liberar más de 600 submuniciones, las cuales están diseñadas para estallar al impactar contra el suelo. Sin embargo, cabe destacar que algunas de estas submuniciones no detonan y quedan enterradas en el terreno.
Es importante mencionar que más de 100 países, incluyendo miembros de la OTAN como Francia y Alemania, se oponen al uso de bombas de racimo. Estos países han ratificado la Convención sobre Municiones en Racimo, la cual entró en vigor en 2010. Sin embargo, Ucrania, Rusia y Estados Unidos no son parte de esta convención.