Pese al clima de incertidumbre comercial con Estados Unidos y los efectos de nuevas políticas arancelarias, la economía mexicana mostró señales de fortaleza en abril de 2025. De acuerdo con el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) publicado por el INEGI, la actividad económica del país creció 1.38% anual, impulsada principalmente por el sector servicios.
Servicios y actividades primarias empujan el crecimiento
El mayor dinamismo provino del sector terciario (servicios), que avanzó 2.17% anual, alcanzando su mejor desempeño desde agosto de 2024. Destacaron los servicios profesionales, científicos y técnicos, con un alza notable de 11.25%.
En contraste, el sector primario (agricultura, ganadería, pesca) creció 3.24% anual, sumando así dos meses consecutivos de avance.
Por otro lado, el sector industrial o actividades secundarias registró una contracción del 0.7% anual, acumulando dos meses en retroceso, arrastrado por el mal desempeño del sector minero, que cayó 6.79%.
Desempeño mensual: leve alza general
En comparación mensual, el IGAE avanzó 0.54% respecto a marzo. El sector servicios creció 0.91%, las actividades secundarias aumentaron 0.08%, mientras que las primarias cayeron 3.7%.
¿Qué se espera para el resto de 2025?
Según Alberto Ramos, economista en jefe para Latinoamérica de Goldman Sachs, el panorama no es completamente alentador:
“La actividad real podría enfrentar desafíos por la incertidumbre política interna y externa, un impulso fiscal negativo y una débil confianza empresarial”.
Sin embargo, destacó factores que podrían sostener el consumo interno, como el sólido crecimiento salarial y los flujos de crédito.
En cuanto a la inversión, Ramos prevé que la pública se moderará por la necesidad de consolidación fiscal, mientras que la privada podría verse afectada por la incertidumbre relacionada con la política comercial estadounidense y la revisión del T-MEC.