La desigualdad del ingreso en México duplicó al promedio de los países que pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
En esa profundización de la desigualdad, México está en una situación peor que el promedio de los países de la OCDE, organización a la que pertenece el país desde 1994, año en que se firmó el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, profundizando el actual modelo neoliberal al que han adherido los sucesivos gobiernos del PRI y PAN.
«Por primera vez después de la crisis de 2008-2009, la totalidad de las economías desarrollas registran tasas positivas de crecimiento y en las llamadas economías emergentes hay avances en cuanto al desempeño de la actividad productiva«, comentó Gurría.
Sin embargo, el crecimiento es disparejo en cuanto a sus beneficios. En promedio para los países de la OCDE, el ingreso de la décima parte más rica de los hogares es 10 veces superior al mismo porcentaje más pobre. Antes de la crisis, la diferencia era de siete veces, lo que quiere decir, que la desigualdad ha crecido 40 por ciento en una generación.
En México, la diferencia entre diez por ciento de los hogares más ricos y el de los más pobres es de 20 veces, una desigualdad que es el doble del promedio de la OCDE.
Con información de La Jornada