Directivos de nueve organizaciones nacionales e internacionales que defienden la libertad de expresión solicitaron al presidente Enrique Peña Nieto reciba a relatores especiales para la libertad de expresión de las Naciones Unidas y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a fin de investigar el creciente número de ataques contra periodistas en México.
Señalan que ambos relatores ya han hecho una solicitud oficial para visitar México, pero que dicha petición sigue sin contestarse hasta ahora.
En una carta al titular del Ejecutivo federal, las organizaciones expresan su consternación:
“Señor Presidente, la violencia debe cesar. México es considerado como uno de los países más peligrosos para los periodistas en el mundo, superado sólo por los estados devastados por la guerra. Es una situación intolerable para un país que se enorgullece de sus esfuerzos por promover el desarrollo político, económico y social”.
La misiva está suscrita por Vincent Peyrègne, director general de la Asociación Mundial de Periódicos y Editores de Noticias; Christophe Deloire, director general, Reporteros sin Fronteras; Thomas Hughes, director ejecutivo, Artículo19; Joyce Barnathan, presidente del Centro Internacional de Periodistas; Jaime Abello, director ejecutivo de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano Gabriel García Márquez; Bruce Shapiro, director ejecutivo del Centro Dart para el Periodismo y el Trauma, en la Universidad de Columbia; Tina Carr, directora de Rory Peck Trust; Carlos Lauría, director de Programa y Coordinador Senior de Programa Las Américas, del Comité para la Protección de los Periodistas, y Carlos Ponce, director regional de América Latina y el Caribe de Freedom House.
Todos ellos solicitan al Peña Nieto que tome medidas concretas, efectivas e inmediatas, pues durante varios años los periodistas en México han enfrentado niveles crecientes de violencia, intimidación y asesinatos.
“Las organizaciones que representamos han denunciado repetidas veces y con fuerza la falta de protección que se les ha concedido a los periodistas para hacer su trabajo de manera segura y libre, ya sea que abarque el crimen organizado, los asuntos políticos o la corrupción”, señalan.
Con información de La Jornada