A lo largo de 50 años, la Asociación Pro Personas con Parálisis Cerebral (APAC) ha logrado transformar la vida de personas diagnosticadas con parálisis cerebral y otras discapacidades, con lo que se ha posicionado como una de las asociaciones con más logros avalados por CONEVAL, INADEM, CEMEFI, entre otros.
¿Cómo surgió?
APAC fue fundada por un grupo de madres solteras motivadas por brindarle atención integral a sus hijos con Parálisis Cerebral. Gracias a su esfuerzo, actualmente el Centro cuenta con personal especializado que ofrece asesoría y capacitación a otras instituciones para crear espacios multidisciplinarios con el fin de mejorar su calidad de vida.
De 2011 a 2019, APAC fue presidida por Leonor Ortiz Monasterio una de las mujeres más destacadas en México por su labor altruista. En 2011, Leonor Ortiz Monasterio tomó la presidencia de APAC y con el apoyo de su sobrina Tatiana Ortiz Monasterio continuó con la amorosa labor que hace 50 años encabezó Carmelina Ortiz Monasterio, todas encaminadas a un mismo fin, ofrecer su apoyo a los niños y familias que acuden a diario a la fundación.
Leonor Ortiz Monasterio falleció el 26 de febrero de 2019, pero su recuerdo continúa presente en el alma de cada una de las personas que recibieron su ayuda. Durante su sepelio, los niños de la fundación realizaron un tapete de flores alrededor de su féretro como prueba del gran cariño que cada uno le guardará por siempre en su interior.
APAC hoy en día
Actualmente APAC es presidida por Guadalupe Maldonado Guerrero y cuenta con 46 Centros en el país, mediante los cuales promueve el respeto a los derechos humanos de las personas con discapacidad. Diariamente atiende a más de 500 personas de escasos recursos: bebés, niños, adultos y sus respectivas familias.
APAC ofrece apoyo psicológico, orientación en la atención y educación a los familiares de las personas que atiende, además fomenta su paulatino crecimiento a través de tres ejes principales:
-Educación formal
-Rehabilitación y Servicios de Salud
-Educación Alternativa
Alfonso y Lulú, padres de Sara y Eva de 4 años, comentan: «Una vez que nos confirmaron un diagnóstico que ya sospechábamos, comenzamos a orientarnos sobre qué es la parálisis cerebral. Claro que ahora nos sentimos más tranquilos y contentos porque estamos en el lugar indicado para darles apoyo. Es una experiencia que mejora tu nivel de paciencia muchísimo y es un proceso de aprendizaje diario. Hay días buenos y días complicados, pero hemos aprendido a tener siempre optimismo, colaboración y ganas de trabajar».
¿Qué pasa con la inclusión en México?
En una entrevista otorgada al IWF México, Guadalupe Maldonado Guerrero, directora General de APAC, sostuvo que “aunque hemos tenido avances como país, las barreras sociales aún subsisten en la inclusión laboral, educativa y social” para las personas con Parálisis Cerebral.
México cuenta, aproximadamente, con 500,000 personas diagnosticadas con esta lesión. Así, el reto más desafiante que enfrentan las personas con Parálisis Cerebral «es que, dependiendo de la zona en donde se encuentre el daño, la parálisis cerebral no significa una discapacidad intelectual, entonces puedes tener mentes brillantes en cuerpos que no responden», agrega Maldonado.
Parálisis Cerebral y COVID 19
De acuerdo con Maldonado Guerrero, los retos más desafiantes durante la pandemia han sido «adaptar todos los servicios a distancia, poder brindar apoyo alimentario a las familias y brindar servicios con los protocolos biosanitarios necesarios a la población que es muy vulnerable por su condición médica».
3 enseñanzas claves
Respecto a lo aprendido en 50 años de historia, Maldonado detalla que en primer lugar se encuentra «el poder del amor y la sociedad civil organizada», pues «APAC es una organización que surge de un grupo de madres de familia con un hijo con parálisis cerebral, quienes se dan a la tarea de constituir una organización única en México y América Latina, con un modelo centrado en la persona, sus necesidades y retos».
En segundo lugar, apunta, se encuentra la calidad y la calidez transforman vidas, APAC ha replicado su modelo de atención.
Finalmente, sostiene que la última y más importante radica en los logros institucionales y los premios nacionales, como reconocimiento a cada reto que vence un beneficiario.
Con información del IWF México