A fin de ayudar a las y los académicos a aprovechar de la mejor manera la inteligencia artificial generativa y apropiarse de esta tecnología como un instrumento pedagógico, especialistas de la Coordinación de Evaluación, Innovación y Desarrollo Educativos (CEIDE), de la UNAM, desarrollaron el documento titulado “Caja de herramientas No.7. Aplicaciones de la Inteligencia Artificial Generativa para la Docencia”.
Mario Alberto Benavides Lara y Víctor Jesús Rendón Cazales son los autores del texto, el cual puede consultarse de manera gratuita a través del sitio.
Benavides Lara, subdirector de Movilización del Conocimiento en Educación, explicó que mediante esa guía se impulsa la apropiación de la tecnología a través de una propuesta pedagógica que va desde la planificación en el diseño de actividades y de materiales educativos hasta la evaluación del aprendizaje.
El educador destacó: la intención no es aprender a usar una herramienta en específico, sino comprender cuál es la lógica que tiene este tipo de tecnología y cómo la puedo incorporar a mi trabajo como docente, con los estudiantes, por eso se plantearon cinco prácticas con ejemplos.
Los investigadores sugieren cinco pasos que se construyen con la tecnología y están relacionados con identificar una acción, situarla dentro de un contexto específico, ser lo más claros posibles en las instrucciones al sistema, desarrollar una interacción o conversación, aplicarla y evaluarla.
Cada vez surgen más desarrollos y tecnologías, algunos tienen mayor penetración en la sociedad. La que generó furor por la socialización y comercialización de una inteligencia artificial (IA) fue ChatGPT, a través de la empresa Open IA; también se han sumado similares como Gemini y otras.
En tanto, Rendón Cazales, coordinador de Generación y Diseminación del Conocimiento en Educación, recordó que la propuesta de elaborar el documento surgió durante la Primera Jornada de Inteligencia Artificial Generativa en Educación UNAM, realizada en octubre de 2023, cuando sectores de la comunidad empezamos a plantear cómo integrar esto a la praxis educativa.
Si uno revisaba las ideas que había de este tipo de instrumentos veíamos que se le daba peso a que realizarían el papel del docente o del estudiante. Nosotros estamos convencidos de que son parte de un conjunto de instrumentos para quienes participamos en el acto educativo, subrayó el investigador.
Una de las ventajas que ofrece el material, agregó, es que el profesor no necesita seguirlo como un manual estricto de instrucciones, sino que puede emplear lo que le sea pertinente para su cátedra y tomar las mejores decisiones al momento de evaluar al alumnado.
Los investigadores esperan que los profesores aprovechen esta iniciativa, a fin de mejorar la enseñanza. A futuro se tiene el objetivo de continuar con la producción de materiales similares, pero enfocados a los estudiantes, donde se les muestre cómo ingresar correctamente la IA para detonar el aprendizaje.