El estado norteño de Nuevo León cuenta con alrededor de 3 mil empresas extranjeras, de las cuales, la mitad son estadounidenses. Allí se concentran gigantes del acero, vidrio, cemento, electrodomésticos y automotrices; es un punto clave para la exportación e importación con Estados Unidos y Canadá.
El despegue económico de Nuevo León, que aporta un 7.3 por ciento al PIB nacional, comenzó a aflorar a partir de la creación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, cuando empresas de Estados Unidos encontraron facilidad de obtener insumos y mano de obra barata.
Donald Trump, declaró varias veces su intención de anular o reformar el TLCAN e incentivos a empresas estadounidenses para mantener sus operaciones en ese país. Por ejemplo, Carrier había anunciado que traería 2 mil 300 empleos al municipio de Santa Catarina pero después de la intervención de Trump el número de plazas será considerablemente menor.
Los presidentes municipales están muy preocupados por el proteccionismo propuesto por Trump ya que reduciría el ritmo de inversiones y actividades económicas que dan empleos a una gran parte de la población norteña. Por ejemplo, Mauricio Fernández, alcalde de San Pedro, acusó a Trump de hacer lo mismo que criticó de China. «Lo contrario a lo que dijo en campaña, como ahora en Indiana, donde está tratando de incentivar con dinero«, en referencia a subsidios otorgados para industrias de ese estado.
Por su parte, empresarios del sector automotriz consideran que medidas proteccionistas en Estados Unidos provocarían un encarecimiento de productos en el país vecino del norte ya que tendrían que producir con mano de obra de ese país más cara y el costo de la fabricación aumentaría.
Con información de El Universal