Estados Unidos endureció este lunes las sanciones financieras contra Venezuela, lo que dificultará a Caracas vender activos estatales tras la relección del presidente Nicolás Maduro, al tiempo que las 14 naciones del Grupo de Lima, entre ellos México, desconocieron el proceso electoral y convocaron a sus embajadores en la república bolivariana.
Reino Unido, Alemania y España se sumaron a los países que no reconocen las elecciones venezolanas; en contraste, Rusia felicitó a Maduro por su relección, al igual que China y Turquía, que se sumaron a Cuba, Nicaragua, Bolivia y El Salvador, que pidieron respetar los resultados.
La Casa Blanca dijo que el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que prohíbe a los estadunidenses comprar obligaciones de deuda de Venezuela, incluida la estatal PDVSA, instrumentos que según funcionarios fueron utilizados por Caracas para obtener ingresos ante la necesidad de liquidez.
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, rechazó las sanciones anunciadas desde Washington.
Trump exigió a Caracas restablecer la democracia, convocar a elecciones justas, liberar a los presos políticos y poner fin a la represión.
Washington tildó de dictador a Maduro y calificó de farsa la votación del domingo, en la que obtuvo la relección con 68 por ciento de sufragios, sacando 47 puntos de ventaja a su más cercano rival, el ex chavista Henri Falcón, en unos comicios con participación de 46 por ciento.
El vicepresidente estadunidense, Mike Pence, afirmó que la votación no fue ni libre ni justa, sino un proceso falso, cuyo resultado es ilegítimo. En un comunicado, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, advirtió que el gobierno de Venezuela enfrentará el aislamiento de la comunidad internacional hasta que restablezca la democracia y celebre elecciones libres.
Según Pompeo hay varios ejemplos de cómo el gobierno de Maduro intervino en el proceso electoral, entre ellos la represión de la prensa, el dominio oficialista sobre el consejo electoral y el silenciamiento de la disidencia. También acusó al gobierno de Maduro de racionar selectivamente el alimento para manipular los votos de los ciudadanos hambrientos.
Estados Unidos está con las naciones democráticas en apoyo del pueblo venezolano y adoptará medidas económicas y diplomáticas rápidas para apoyar el restablecimiento de su democracia, sentenció.
En un mensaje titulado: El día después de la farsa, la Organización de los Estados Americanos desconoció a Maduro como presidente legítimo de Venezuela y lo acusó de celebrar elecciones sin tener democracia.
Agregó que los comicios se celebraron con más de 300 presos políticos en las cárceles y con el Estado usando todos los recursos a su disposición para la farsa, y afirmó que Venezuela necesita un gobierno de transición que pueda generar un sistema electoral legítimo que permita soluciones al país.
El Grupo de Lima (Canadá y 13 países latinoamericanos, entre ellos México) llamó a consultas a sus embajadores en Caracas, acordó reducir el nivel de las relaciones diplomáticas y actuar para bloquear fondos internacionales a Venezuela.
Tras las críticas del Grupo de Lima, Jorge Rodríguez, jefe de campaña de Maduro, dijo: no nos importa lo que opinen estos países, y denunció una agresión orquestada por Estados Unidos y la derecha venezolana para desestabilizar al presidente Maduro.
Con información de La Jornada