La reciente invitación al presidente de Rusia, Vladimir Putin, para asistir a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, ganadora de la elección presidencial en México, ha generado reacciones de diversas partes del mundo. Por su parte, la embajada de Ucrania en México se pronunció al respecto, subrayando las serias implicaciones de la presencia de Putin en un evento de tal magnitud.
En un comunicado, la representación diplomática de Ucrania reconoció que el Gobierno de México extendió invitaciones a los representantes de los países con los que mantiene relaciones diplomáticas, y agradeció la invitación al presidente Volodymyr Zelensky. Sin embargo, expresó su preocupación por la invitación a Putin, recordando que el líder ruso enfrenta una orden de arresto por crímenes de guerra relacionados con la invasión a Ucrania, incluyendo el secuestro y traslado forzoso de niños ucranianos a Rusia, un acto que México reconoce como parte de la jurisdicción de la Corte Penal Internacional (CPI).
“Confiamos en que el Gobierno mexicano cumplirá en todo caso con la orden internacional de detención, entregando al susodicho al órgano judicial de las Naciones Unidas en La Haya”, se lee en el comunicado ucraniano. Además, subraya que Putin y la cúpula política y militar de Rusia deben rendir cuentas ante la justicia por la invasión a gran escala en Ucrania.
📝 En relación con la información surgida sobre la decisión de invitar a Vladimir #Putin a la toma de posesión de la Dra. Claudia #Sheinbaum como nueva presidenta de #México, así como para responder a las varias consultas de los medios de comunicación informamos lo siguiente: pic.twitter.com/ml99mbrlAX
— Embajada de Ucrania en México 🇺🇦 (@UKRinMEX) August 7, 2024
Por otro lado, Estados Unidos también se manifestó sobre el tema, señalando que la presencia de un “autócrata responsable de tanta muerte y destrucción” podría restar valor a lo que será un evento histórico para México. Un portavoz del Departamento de Estado comentó a CNN que las tomas de protesta deben ser celebraciones de la democracia y transiciones pacíficas del poder, dejando claro que, aunque la decisión de invitar a Putin es soberana de México, su asistencia podría tener implicaciones negativas.
La relación entre México y Rusia se ha mantenido desde 1980, con diversos encuentros bilaterales a lo largo de los años. El contacto más reciente con Putin se produjo en 2021, cuando sostuvo una llamada telefónica con López Obrador para tratar temas económicos y de salud en el contexto de la pandemia de COVID-19.