El 97 por ciento de las lenguas en el orbe vive en la oralidad con la misma capacidad de expresar su mundo, necesidades, simbolismos y transmisión de experie...
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo declaró que el Gobierno de México enviará una nota diplomática a Estados Unidos, luego de que ese país anunciara la ins...
“Movimiento naranjaaaa, movimiento ciudadanooo...” ¿Te acuerdas de ese morrito que no podías sacarte de la cabeza por semanas? ¡Pues reapareció! ¡Sí, él mism...
El biocarbón o biochar -carbón vegetal que se obtiene de residuos de biomasa- mejora las propiedades del suelo, por lo que es una alternativa para el manejo sos
A las mexicanas se les diagnostica cáncer de mama aproximadamente a los 52 años, una edad más temprana en comparación con las de Estados Unidos, Europa y Can...
Los arquitectos Ronald Rael, profesor de arquitectura de la Universidad de California, y Virginia San Fatello, integrantes del Colectivo estadounidense Chopeke, tuvieron la genial idea de usar el muro que divide a México con Estados Unidos para colocar unos «sube y baja» para los chamacos.
Los juguetes de metal, pintados de rosa se instalaron entre ambas fronteras, en una sección del muro que divide a Chihuahua y Nuevo México para que se pudieran divertir con las familias mexicanas la tarde del domingo en el área de Anapra, una de las colonias más pobres al oeste de Ciudad Juárez, y Sunland Park, en Nuevo México.
La frontera entre México y Estados Unidos se convirtió en un parque de juegos con la instalaciones de tres balancines conocidos como “sube y baja”, como forma de protesta.