A tan sólo unas semanas de la entrega número 60 de los Premios Grammy, los mexicanos seguimos celebrando que nuestro país y sobre todo nuestros intérpretes son reconocidos como lo merecen en una ceremonia tan importante para la industria musical.
El domingo 28 de enero el Madison Square Garden de Manhattan se vistió de gala para recibir a los latinos nominados de Chile, Perú, Colombia, Uruguay, Paraguay, Argentina y por supuesto México. Los favoritos de la noche sin duda eran Luis Fonsi y Daddy Yankee con su éxito “Despacito”, que al final no quedó entre los ganadores.
Sin embargo, también esa noche una gran artista mexicana llegó al recinto ubicado en el corazón de Nueva York vestida de gala, pero con un imponente traje de charro. ¿De quién hablo? De la inigualable Aida Cuevas.
Nominada junto con Alex Campos, Julión Álvarez, Humberto Novoa y El Recodo de Cruz Lizárraga, al final la ganadora indiscutible fue Aida Cuevas en la categoría de “mejor álbum de música regional mexicana”, quien al momento de recibir su premio dijo:
-“Aquí estoy muy orgullosa de ser mexicana y de estar aquí con mi traje de charrera”.
La sorpresa fue grande, pues apenas un mes antes Aida declaraba en los medios que le preocupaba competir contra Julión Álvarez y El Recodo, porque además era la única mujer nominada en la misma categoría.
La noticia de su nominación la tomó por sorpresa una mañana, cuando recibe la llamada de un compadre de Chicago que le dice:
-“Comadre, despiértese que está nominada”.
Y efectivamente, después de ser considerada en 8 ocasiones para el Grammy Latino, esta vez tenía un significado especial por ser la primera nominación en los Grammys americanos y precisamente con un homenaje a Cuco Sánchez, con su disco “Arrieros somos, sesiones acústicas”.
Este logro representa el reconocimiento al talento mexicano, pero también una prueba de que el género ranchero sigue vivo. Recordemos que el año pasado, y curiosamente en los Latin Grammy, esta categoría estuvo a punto de desaparecer, como ya lo hicieron el merengue, la cumbia, la música tropical mexicana, el rock femenino y la salsa, entre otras.
En 2016, los Latin Grammy no tuvieron premio al “mejor álbum de música ranchera”, debido al bajo número de inscripciones. Año en el que Vicente Fernández anuncia su retiro de los escenarios y en el que muere un compositor que dio tantas piezas para mariachi: Juan Gabriel.
Para situarnos en la importancia de un premio de esta naturaleza, los Grammy son una distinción otorgada por la Academia de artes y Ciencias de la Grabación de Estados Unidos, reconociendo a un artista por un logro especialmente destacado en la industria musical.
Los Grammy en la música tienen el peso y prestigio de los Emmy en la televisión, los Tony en teatro y los Oscar en cine. Así que ya podemos presumir con mucho orgullo que Aida Cuevas sea la ganadora en un género que identifica a México y que en 2011 fue inscrito en la lista del patrimonio cultural inmaterial de la humanidad de la Unesco.
Recordemos que tenemos una lista de intérpretes maravillosos de la música ranchera como Lola Beltrán, Lucha Villa y Flor Silvestre. Y compositores como José Alfredo Jiménez, Antonio Aguilar y Cuco Sánchez. Además, están las generaciones que aún siguen dando voz al género, como Vicente, Alejandro y Pedro Fernández; Pepe Aguilar, Aida Cuevas.
Por extraño que parezca, a veces nuestras expresiones culturales resultan más apreciadas en el exterior que dentro de nuestro país. Los grupos “Mariachi Sol de México”, “Mariachi Reyna de Los Angeles” y “Mariachi Flor de Toloache”, todos ellos nominados en los Latin Grammy son también agrupaciones formadas en los Estados Unidos.
Actualmente, en Colombia y Venezuela hay mariachis que están empezando a destacar y que son excelentes exponentes de un género que es completamente mexicano, que nos identifica en el mundo, como bien quedó establecido por la Unesco.
Por eso nos llena de dicha que Aida Cuevas haya ganado este premio y que le diga a todos los países que el género ranchero no ha muerto en México, que sigue gracias a voces como la suya y que seguirá por muchos años más.
Aida es un ejemplo de esfuerzo, disciplina y talento. Empezó a cantar cuando apenas tenía 11 años en concursos de aficionados y su primera presentación a nivel nacional fue en un programa semanal de radio en la XEW llamado “El Taller”, en 1975, cuando apenas tiene 12 años de edad.
Y tan sólo 2 años después se presenta en Europa, marcando así el inicio de muchas actuaciones internacionales que pronto la establecen como la “máxima exponente de la música mexicana”. Ha pisado escenarios como El Auditorio Nacional, El Palacio de Bellas Artes, El Madison Square Garden y el Hollywood Bowl, entre muchos otros.
Aida ha cantado con grandes artistas de fama internacional como Plácido Domingo, Celia Cruz, Juan Gabriel, Gloria Estefan y Vicente Fernández. Y entre las personalidades para las que ha cantado están Gerald Ford, Bill Clinton, George W. Bush, el Sha de Irán, Pierre Tradeau, Los Reyes de España y Sean Connery.
A la fecha, Aida Cuevas tiene 37 discos grabados, ha ganado discos de oro y platino por sus ventas, cuenta con más de 100 reconocimientos de presidentes, reyes, gobiernos y varias instituciones internacionales. Y además es madre de 3 hijos que también están en el mundo de la música.
Después de este breve recorrido por la carrera de Aida Cuevas y de celebrar este Grammy que nos dio a México, te pregunto a ti que me escuchas esta mañana en ¡Qué tal, Fernanda!: ¿Te gusta la música ranchera, el mariachi? ¿Quiénes son tus intérpretes favoritos? ¿Qué canción no puede faltar en una reunión con mariachis y tequila?
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